EL ARTE DE LA REPLICA

Teófilo Haro.

La última semana ha estado tan movida que los recuerdos del 27F se agolpan en los medios, donde declaraciones más declaraciones menos, dardos para allá y otros para acá parecen ser la tónica que justifica todo.  Toda la culpa pareciera recaer en uno y otro bando dependiendo de quien vocifere primero y quien replique la réplica del replicador de turno, porque si en algo somos “secos” es en este magnífico arte de  replicarle al otro y ver “la paja en el ojo ajeno”.  Así que a ponerle la firma de antemano que nadie es culpable de nada por las lentas reacciones en el terremoto y por supuesto nadie es culpable de nada en esto de la reconstrucción, porque estamos todos trabajando 24 horas los siete días de la semana.  Acá los únicos culpables son los numeritos, claro, esos que no cuadran por ningún lado y que han dejado de ser objetivos y seriecitos:  El Gobierno dice que llevan un 47 por ciento de reconstrucción, mientras que el Observatorio Ciudadano para la Reconstrucción, de la Universidad de Chile, insiste en esto de replicar que solamente un 10% de las viviendas se han entregado.



En todo caso, y a falta de encuadres matemáticos, el Festival de Dichato le dejará un momento de evasión necesario para seguir esperando que las cifras cuadren, porque de seguro todo esto es momentáneo y las cifras solitas decantarán en algún informe oficial del que después “nadie” será culpable.   Al menos que yo recuerde nunca nadie es plenamente responsable de ninguna promesa política, electoral o presidencial, sin que por lo menos no venga “con letra chica”.  Eso, de apoco lo asimila el chileno medio. 

Así, en medio de este terremoto de declaraciones, siguen los movimientos.  Cuando menos se piensa aparece un temblorcito por aquí y otro por allá, hasta que algo con más fuerza se empodera del ambiente y ¡cataplum! Uno de grado seis coma cinco (por lo menos) remece las puertas, los sillones y los taburetes de cuanta oficina burrocrática duerme la cómoda inercia de los injustos, para despertar abruptamente con una rebelión ad portas, seguramente inducida, atizada y politizada por quién sabe qué ocultos intereses sectoriales, partidistas (e incluso terroristas).

Por si acaso, el Gobierno en cumplimiento de la sagrada misión superior de mantener el orden público, manda un Hércules llenito de uniformes listos para controlar a los desbandados.  También manda un arsenal de querellas invocando la Ley de Seguridad del Estado, que nunca está demás, porque a los violentistas hay que desanimarlos de entradita.

AYSÉN MOVILIZADO

Tu problema es mi problema.  El slogan del conflicto de Aysén que convoca a múltiples sectores de la Patagonia chilena ha sentado un petitorio de 10 puntos y ha salido a la calle por respuestas de la autoridad.  No faltó  el pez gordo que indicó que en vez de protestar deberían de celebrar, ya que dicha región ha sido la de mayor crecimiento en el país.  Tamañas declaraciones no hacen más que apagar el fuego con bencina, porque dicho crecimiento debe estar en algún bolsillo allá en Santiago y lejos de este apartado lugar de Chile que ve cómo literalmente “todo” es más caro, donde la bencina –por ejemplo- vale $1.100.- el litro, mucho más caro que el kilo de merluza que los pescadores venden a sólo  800.- 

Lo cierto es que las réplicas llegan de todos los sectores reforzando el petitorio regionalista, que incluye entre otros puntos la rebaja de la gasolina, mayor inversión en el sector público, sueldo mínimo regionalizado, una universidad para Aysén, consultas populares con el carácter de vinculantes, protección a la pesca artesanal por sobre la de arrastre, rebaja en el costo de la canasta básica, creación de rutas para los campesinos, regionalización de las pensiones para los adultos mayores.

Toda una batería que está lejos de ser sólo un movimiento del sector pesquero artesanal, como mañosamente ha querido aparecer en los medios nacionales, al parecer el grado de organización y determinación de la gente es bastante mayor que el que esperaban en La Moneda, que primero dijo muy sueltita de cuerpo que las demandas eran injustificadas, mientras el Presidente estaba de vacaciones en Bahía Coique (ahí mismo donde la Inspección del Trabajo multó a la empresa donde el Mandatario es co-propietario y no había contratos, sueldos por debajo de mínimo ni implementos de seguridad).

Movimiento social amplio

Pero como ya estamos acostumbrados a las vueltas de carnero, ahora parece que de injustificadas pasan a ser prioridad nacional, donde el Presidente adelanta el término de sus vacaciones y él mismo encabezará el lunes una reunión con los dirigentes del conflicto.  Tampoco sorprendería si después de dicha reunión sale una propuesta de alguna “mesa de diálogo” estilo mesa de diálogo mapuche, o mesa de diálogo estudiantil, de esas que sirven para “bay pasear”  el tema y chutear las soluciones al futuro, pero sin futuro.

Las protestas dejaron a un poblador herido grave, con perdigones y la pérdida de uno de sus ojos.  Teófilo Haro debía pasar por el puente para llegar a su casa, cuando detrás de un árbol, y a unos dos metros de distancia alguien le grita “aquí te rematé”.   Luego sintió el disparo en la cara que le reventó un globo ocular y dañó gravemente el otro.  En todo caso las Fuerzas Especiales de Carabineros ya nos tienen acostumbrados a estos episodios de valentía, cuando no ante estudiantes o ante mapuches movilizados, con heridos graves, o muertos por la espalda.  La réplica de don Teófilo no se hizo esperar y disparó con la fuerza de su convicción  una muy grave acusación, de la que aún no hay contra-réplica.  En el hospital de Coyhaique se presentaron efectivos de la Dipolcar, (inteligencia de Carabineros) para que éste firmara una supuesta declaración que nunca había preparado, ante lo cual se negó alegando que vendado como estaba no podía ver nada.  De todas maneras, le entintaron los dedos y pusieron sus huellas en un papel.   El método sigue siendo el mismo que el utilizado en dictadura.
 

Es que de nada ha servido el triste pasado, como para seguir legitimando el abuso policial.  Esta democracia costó desaparecidos, muertos y miles de torturados, apremios ilegítimos, abuso policial recurrente, que lamentablemente cada vez que la ciudadanía expresa su descontento, se repite con demasiada ligereza en un ciudadano de este país.  Ninguna democracia sana puede tolerar ni la metodología ni la fuerza indiscriminada en nombre del bienestar público, ni la amenaza de criminalización de los movimientos.


¿Dónde están los terroristas de Carahue, -por los incendios forestales- que ameritaron cadena nacional y discurso presidencial, amén de mucha portada, mucha tele y programas radiales? 

El delirio del Ministerio del Interior de ver terroristas a la vuelta de la esquina ya es patético, cuando no enfermizo.

En el arte de la guerra, el que pega primero pega dos veces, pero en el arte de la réplica parece que el asunto tiene sus variantes.   En Aysén, “tu problema es mi problema” se convirtió en un movimiento social transversal, donde el transporte, los empelados públicos, y hasta la Cámara de Comercio, (sin olvidar a senadores de gobierno),  afirman que las demandas son al menos justas.   Un temblor que ondula de muchas partes  y que traerá dolores de cabeza y réplicas de todos los grados.

  

Gabriel Reyes,
Cónsul PPdM para Puerto Montt.
http://gabrielreyeschile.blogspot.com